IRA LOMBARDÍA. THE REST IS HISTORY

13.04.21 >30.07.21

La práctica artística de Lombardía emerge del campo expandido de la fotografía para centrarse en la transformación del paradigma posmoderno en relación con la cultura visual digital.En particular, reflexiona sobre el impacto y el valor de la documentación del arte fotográfico, en cómo esas imágenes se producen, distribuyen y consumen, y como estas fluctuaciones afectan a los significados e ideologías que definen nuestra idea del arte.

En su tercera exposición individual en la Galería Alarcón Criado, “The Rest is History”, se presentan tres nuevos proyectos inéditosjunto al proyecto “Visual Strike” (2012). Esta exposición sirve como avance a la primera muestra individual de la artista en Estados Unidos, comisariada por DJ Hellerman y que tendrá lugar en septiembre de 2021 en SCAD Museum, Savannah (GA).

Estos tres nuevos proyectos surgen de una misma investigación en la que la artista lleva años inmersa y que resume de la siguiente manera:

“No me interesa la fotografía como imagen, como contenido visual. Me interesa de la fotografía todo aquello que no es la imagen: los flujos, las dinámicas, las jerarquías, “el estatus” y particularmente,la fotografía como soporte teórico e ideológico de otras prácticas artísticas. Me interesa el impacto que el medio fotográfico ha tenido en las artes y para ello me he centrado en el estudio de la fotografía como medio de documentación artístico, es algo que me resulta fascinante. Si durante el siglo XIX la fotografía jugó un papel trascendental en la diseminación de los objetos artísticos y fue el origen de la dicotomía entre “el original y la copia”, durante el inicio del siglo XX fue “la responsable” del surgimiento de las vanguardias artísticas y el arte conceptual; y en los años 70 es cuando la nueva categorización de la fotografíacomoindex, dio lugar a la desmaterialización del arte y especialmente de la escultura. Este desplazamiento desde el objeto artístico al cuerpo, al arte de acción, no puede ser entendido al margen de la fotografía. En realidad, la historia del arte contemporáneo no se puede comprender sin la práctica fotográfica.

El reto ahora es aproximarnos a los nuevos usos fotográficos surgidos gracias a la fotografía digital, internet y las redes sociales. No podemos resistirnos al impacto que estas nuevas prácticas tienen en todos los aspectos de nuestra vida, incluido el arte. Las reglas del juego han cambiado y lo han hecho para quedarse; como artista siento la responsabilidad de estudiar el pasado para poder trabajar sobre los conflictos del presente.  La idea de aura o incluso la de index están obsoletas, y eso deja un vacío teórico. Por primera vez la fotografía ha ganado terreno a lo textual, las imágenes van por delante de la teoría.”

 

“The Rest is History” / Chroma Art Prints / 2021

Esta investigación fue central para el proceso de innovación técnica que ha supuesto la creación de lo que la artista ha definido como “Chroma Art Prints”,y que supone la combinación de técnicas tradicionales como el fotograbado – muy utilizado durante el siglo XIX y XX para la reproducción de documentación artística en libros y copias – con otras de reproducción mecánica muy habituales durante el siglo XX como la serigrafía y finalmente la interacción digital que permite que las piezas sean alteradas por los usuarios.

“En “The Rest is History” las piezas parten de la apropiación de archivos históricos, que son abnegados con una mancha serigráfica. Este acto iconoclasta logra la creación de una pantalla que permite editar las imágenes de forma muy sencilla. De esta manera un trabajo bidimensional puede incorporar no sólo otras imágenes, sino reproducir archivos en movimiento. La pieza en sí no sólo es un híbrido, va más allá. Plantea un conflicto consistente en la suma de contrarios: es aura y es copia; es un “objeto artístico” y carece de soporte; está acabado y no lo está, quedando abierto a la manipulación por parte de los espectadores. Estas piezas lo son todo y no son nada”.

 

“How to Clean Backgrounds” / 2021

“Si durante los años 70 la fotografía se baso en la idea de index, hoy ese concepto parece obsoleto. Esa conexión de causalidad, que permitía que la fotografía formara parte de esta categoría sígnica se ha desvanecido con la entrada de las herramientas digitales y los programas de postproducción. Ya no existe una imagen latente, y la luz no deja ninguna huella permanente en ningún soporte analógico”.

En “How to Clean Backgrounds”, Lombardía se apropia del popular título de uno de los numerosos tutoriales de Photoshop que podemos encontrar online, para aplicar herramientas como el tampón de clonar, la varita mágica, el parche o el lápiz corrector, a conocidas fotografías de documentación de performances y acciones de los años 70.

El proceso de “limpieza”, sería el inverso al de dejar un rastro, huellas, indicios y cualquier tipo de signo característico de la teoría del index, incluido el actor principal, el referente, el artista. Así nos encontramos con una RueGentil-Bernardde Fontenay-aux-Roses vacía (sin duda en referencia al título de la pieza “Leap into de Void” de Yves Klein). Ese nuevo vacío altera la fotografía original de Harry Shunk y nos permite cuestionarnos la naturaleza fotográfica y la idea de index. Al mismo tiempo, el espacio se reactiva y puede ser de nuevo interpretado, incluso habitado.

“La “limpieza” de las imágenes, que lleva horas o incluso días, según la fotografía, es realmente inmersivo y ha tenido un profundo efecto en mi trabajo.  De algún modo me sentía muy identificada con Laderman Ukeles, ya que al fin y al cabo era un trabajo de “limpieza”. Al mismo tiempo fue conflictivo, especialmente cuando trabajé en archivos de artistas que admiro enormemente pero cuyo impacto y difusión a nivel histórico ha sido menor que de algunos otros, especialmente aquellos relativos a mujeres y a artistas latinas o afroamericanas. Manifestar su ausencia tiene un significado y unas implicaciones que van más allá del espacio”.

 

“Speechless” (The perception of the Visual World ) / 2021

En el año 2018, en el Instituto Aby Warburg de Londres descubrí un archivador metálico que contenía numerosas diapositivas de cristal. Sin un orden establecido, sin ninguna documentación e incluso con diferentes formatos, finalmente pude conectar varias imágenes que parecían hacer referencia a una misma conferencia y cuya primera diapositiva reproducía la portada del libro “The Perception of the Visual World’, obra del psicólogo estadounidense James J. Gibson. En otras diapositivas aparecían reproducidas las ilustraciones del libro, aunque también había otras imágenes sobre historia del arte o incluso dos diapositivas a modo de “memes” y también dos diapositivas que hacían referencia a un segundo libro “Eye, Film and Camera in color Photography” de R.M. Evans.

A pesar de contar con los libros y las notas manuscritas en cada una de las diapositivas, al no existir ninguna numeración u orden establecido, y sin ninguna grabación o registro fonográfico que sirviera como registro, no había forma de saber cuál fue el contenido que ordenaba y conectaba dichas imágenes, ni tan siquiera quien fue su autor. Lo único que parecía claro es que lamaterialidad de estas diapositivas impresas en vidrio paradójicamente entra en conflicto con la inmaterial de un discurso perdido.

“Ese dilema, la tensión entre lo objetual y lo inmaterial, entre el documento y el referente, entre las imágenes y las palabras, entre la fotografía como índexy el lenguaje como estructura, se materializó en una serie de 12 piezas. En cada una de ellas, en una vitrina, dos imágenes se ponen en diálogo: en un primer plano, impresa sobre el vidrio, podemos ver a tamaño natural una reproducción de las fotografías que tomé en el Instituto Warburg, donde mi mano sujeta una a una las diapositivas.  En el fondo, en segundo plano, vemos imágenes desenfocadas que reproducen fragmentos la documentación fotográfica piezas artísticas de los años 70 en las que se ensayaba un arte carente de soporte del que solamente quedaba el registro fotográfico o audiovisual de la acción llevada a cabo”.

 

“Visual Strike” /2012

En una contemporaneidad en la cual la saturación es tanto objetual como visual y la mayor parte de las imágenes en circulación no tienen un soporte físico, la obra Visual Strike,actualiza esa acción de resistencia a la sobreproducción artística centrándola de un modo específico en el ciberespacio y, más concretamente, en la web. En mayo del 2012, Lombardía decidió emprender una «huelga visual» que la llevó a eliminar de su web todas las imágenes de sus obras artísticas. Durante los mil días que duró la huelga, cualquiera que visitara su web encontraba un manifiesto que explicaba las razones por las que había decidido adoptar esa medida, entre las cuales citaba la necesidad de no contribuir al consumismo visual y la bulimia icónica, en defensa de una ecología de la imagen. Lombardía entiende Visual Strikecomo una acción que promulga una pausa y un descanso para la mirada, pero también un acto de resistencia y rebelión.

“Hay tantas imágenes que ya prácticamente no tienen valor, tantas que son demasiadas, que pierden su fuerza, su significado, tantas que no se dejan respirar, ahogándolo todo, absolutamente todo.

Y ahora mi “inspiración” me ha pedido permanecer casi callada, me ha pedido pronunciar tan solo una palabra, me pide un descanso para la mirada, un espacio casi en blanco, me pide una cantidad muy pequeña, ínfima, me pude hacer algo que diga tanto como el silencio y eso es lo que estoy dispuesta a ofrecer”.