Jorge Yeregui. La escritura de las piedras
05.11.2024 > 06.02.2025
La escritura de las piedras es un proyecto de investigación y creación que, desde las prácticas artísticas, aborda los efectos de la transición energética sobre el territorio. Tanto el tradicional sistema de producción basado en combustibles fósiles como las energías renovables generan un impacto significativo en el entorno. El momento actual de transición entre ambos modelos se presenta como un observatorio privilegiado para analizar estas cuestiones vinculando pasado, presente y futuro desde una perspectiva que conecte lo local con lo global.
Del cierre de la minería de carbón a los proyectos de restauración medioambiental, la propuesta se articula a través de un conjunto de obras que abordan, entre otras cuestiones, el impacto de los procesos extractivos sobre el territorio, la noción de tiempo profundo o la aplicación de la geoingeniería como solución para paliar los efectos del cambio climático.
La escritura de las piedras se localiza en la Gran Corta de Fabero, una de las mayores minas de carbón a cielo abierto de Europa cuya explotación cesó en 2018 como consecuencia del cambio de modelo energético. En la actualidad este espacio se encuentra sometido a un intenso proceso de restauración medioambiental que implica el modelado de la topografía y la revegetación del lugar. En este contexto, la piedra se ha convertido en un elemento común y protagonista en ambas actividades. Por una parte, la acción principal durante su explotación de una mina a cielo consiste en convertir la roca en piedras para poder alcanzar las vetas de carbón. Por otra, en el proceso de restauración medioambiental los taludes y montículos de piedras abandonados deben distribuirse para recomponer una topografía más amable. El título del proyecto se ha tomado del libro homónimo publicado por Roger Caillois en 1970 en el que pone de manifiesto su obsesión por las piedras.
La muestra enlaza con trabajos previos sobre el impacto de la minería de carbón –Las montañas perfectas (FCAYC, 2012)– ampliando la reflexión a nuevas cuestiones como los procesos de recuperación del paisaje natural. Así mismo, cuenta con la inestimable colaboración de José Joaquín Parra Bañón quien, para la ocasión, ha extraído un I Martirologio pétreo de su Léxico mineral:
Bosque
El geógrafo registra la belleza primaria de lo que no ha sucumbido por completo al impacto lesivo del mazo y a la voracidad del vértice del cincel, de lo que se resiste a ser analizado por los golpes reiterativos de la herramienta. Registra el eco de los bosques que hubo en la superficie (sigilarias, dicksonias, cyatheas y quizá otros helechos arborescentes) y que ahora, eternidades después, yacen transformados en minerales, descompuestos entre la pizarra y la arcilla, impasibles y tiznados por la obscuridad, hundidos en el subsuelo, cerca del fragor del infierno. Registra la realidad cristalizada en formas irregulares, imperfectas y enemigas acérrimas de la redondez.
José Joaquín Parra Bañon
Contexto
A pesar de las voces contrarias o escépticas respecto al cambio de modelo energético, el proceso de transición es ya una realidad contrastable. No solo por el temor al cambio climático y la creciente concienciación respecto a los límites del planeta, sino también porque las renovables han logrado hacerse un sitio en las agendas de los gobiernos y en los mercados. Si nos fijamos en las políticas europeas a partir de los Acuerdos de París de 2015, a pesar de la demora respecto a las obligaciones asumidas y a situaciones imprevistas como la guerra en Ucrania, el giro es notable. De igual forma, si comparamos el coste de producción de la energía basada en los combustibles fósiles y la generación eólica en el año 2021, esta última ya se situaba por debajo en un gran número de países en Europa, América y Asia
Sobre el terreno, este cambio de rumbo resulta igualmente visible cuando comprobamos que la extracción de carbón y la industria auxiliar han cesado su actividad en todo el territorio nacional, y esto sin grandes movilizaciones por parte de un sector tradicionalmente combativo. Otros indicadores respecto la irreversibilidad del proceso los podemos encontrar en el reciente cierre y demolición de gran parte de las centrales térmicas que daban suministro al país y de las minas de las que se abastecían, así como en los proyectos de restauración medioambiental en los territorios especialmente vinculados a la extracción de carbón.
Para tener un mapa preciso de las escalas que abarca este nuevo paradigma energético es importante tener presente que el cambio de modelo se gestiona desde las autonomías a partir de un plan diseñado a nivel nacional y basado en regulaciones y directrices europeas. Estas, a su vez, vienen motivadas por una crisis climática de dimensión planetaria y por intereses estratégicos y económicos del mismo nivel. En cambio, en lo que respecta a los territorios en transición el cambio de modelo tiene un impacto directo sobre espacios rurales con economías frágiles, basadas en el sector primario, que dependen directamente de entorno.
En el polo opuesto al solucionismo tecnológico encontramos el resurgir de una otra mirada que aspira a un reencuentro con la naturaleza y que, frente a las diferentes formas de extractivismo que explotan el territorio, nos recuerda el impacto que puede tener un parque eólico en el paisaje o se cuestiona la presencia de monocultivos.
En la actualidad el nudo del problema se ha desplazado al binomio energía-clima donde las diferentes perspectivas –política, económica, cultural o científica– y escalas –de lo local a lo global– se articulan en una compleja maraña difícil de desentrañar.
Es en este contexto en el que se sitúa el proyecto La escritura de las piedras, con la confianza de que la investigación desde las prácticas artísticas sea capaz de expandir el campo de estudio respecto al cambio de modelo energético y sus efectos sobre el territorio. Un expansión que permita reflexionar sobre los intereses políticos y económicos que operan en el proceso de transición, la confianza en la tecnología como solución a los problemas ambientales, el rechazo que determinadas energías renovables despiertan en colectivos concienciados respecto al cambio climático, el impacto que este cambio de paradigma tiene en la identidad de los territorios o sobre nuestras capacidades para ampliar los imaginarios.
Agradecimientos:
José Joaquín Parra Bañon; Aula Paleobotánica de Fabero, de forma especial a Joaquín, Titín y Jose; Fundación Cerezales Antonino y Cinia; Grupo de investigación Humanidades energéticas. Energía e imaginarios socioculturales entre la revolución industrial y la crisis ecosocial, en especial Jaime Vindel, Emilio Santiago, Bárbara Fluxá, Santiago Morilla y Coco Moya.